jueves, 20 de marzo de 2014

Nacida, criada, educada y corrompida en Santiago de Chile, bajo la tutela de padres evangélicos, uno ingeniero en informática y otra arquitecta diseñadora.  18 años, uno cada verano, bautizada como Camila Francisca Magaña Rivera. Desde la concepción del saber diestra en la lectura y amante del arte junto al diseño, la primera inserción al arte fue una guitarra, acompañado de mis primeros libros, paralelamente mi educación crecía, primeramente, en un colegio católico para luego saltar a algo completamente diferente, un liceo emblemático donde el entorno y la compañía nueva dio paso a una nueva forma de concepción de ciertos ámbitos de los cuales se explotaron a plenitud mis gustos por la cultura, las ganas de inventar, re-inventar, conocer y a desarrollar el potencial que desde pequeña estaba en mí.
Para cumplir con mis objetivos, sin dejar de lado el sentido social que adquirí participando activamente en las actividades relacionadas con el movimiento estudiantil desde el año 2011 hasta la fecha, decidí estudiar arquitectura en la Usach con la finalidad de ayudar y mejorar tanto como las condiciones de vida del país, hasta ampliar las oportunidades para otras personas; y así expectante de lo que me puede dar la carrera en esta universidad y de lo que puedo entregar yo, como Camila Magaña.